¿Os acordáis del cuento de Pinocho en el que Gepeto era carpintero de profesión? Posiblemente Gepeto no estudió nada para llegar a ser carpintero, lo aprendió.
Si estuviéramos en la actualidad y hace unos días Gepeto hubiera querido trabajar en una empresa privada, seguramente le pedirían el título que demostrara que tenía esos estudios para poder realizar ese trabajo y como no lo hubiera podido acreditar, se quedaría en la calle. Pero si esto sucediera dentro de unos días, probablemente Gepeto pudiera enseñar ese título. ¿Que cómo puede suceder eso? Muy fácil:
El programa Acredita permite que los trabajadores que no tengan título de estudios puedan convalidar su experiencia laboral por un título de Formación Profesional. El programa Acredita está dotado con 24 millones de euros que servirán para costear unas 60.000 convalidaciones en 2011.
Para convalidar tu experiencia laboral se harán convocatorias en cada comunidad autónoma, donde se evaluarán las competencias profesionales que los aspirantes no tengan reconocidas oficialmente. Así los trabajadores que lo deseen podrán continuar sus estudios en formación ocupacional y FP reglada.
Desde el Gobierno:
No se trata de dar títulos, sino de convalidar parte de los planes de estudio porque se entiende que toda la formación práctica asociada a un estudio de Formación Profesional o formación ocupacional se puede haber adquirido en el trabajo.
Hay gente para todos los gustos: están los que encuentran un trabajo, se acomodan y no vuelven a hacer nunca un curso de formación; están los que encuentran un trabajo y de vez en cuando hacen cursos de formación que les sirven como reciclaje profesional y están los que encuentran trabajo, pero cada mes hacen un curso de formación diferente.
Creo que todos tenemos claro que la formación es la clave para desarrollarse profesionalmente (también personalmente, pero ese es otro capítulo), pero muchas veces por pura vagancia, no lo hacemos, aunque parece ser que con la crisis le estamos viendo las orejas al lobo, porque según un estudio de Randstad un 57% de los trabajadores ha mejorado su formación durante este último año para hacer frente a la crisis.
Este interés por la formación surge debido a que el mercado demanda profesionales cada vez más cualificados. La mayoría de los trabajadores prefiere especializarse en su propia área y además, saben que tienen que ser más competitivos, de ahí que el 26% de los encuestados afirman haber hecho algún curso de idiomas en el último año. Hace unos meses ya os comentábamos aquí la importancia de los idiomas, sobre todo para perfiles medios y altos.
Los universitarios son los que más apuestan por su formación. Los trabajadores con título universitario (69%) son el grupo que asegura haber realizado más cursos de formación durante los últimos 12 meses para afrontar la crisis, mientras que en el lado contrario se encuentran los profesionales sin estudios.
Por edades, el grupo de trabajadores que va de los 18 a los 24 años (62,3%) es el que con más ha mejorado su formación durante estos últimos doce meses, ya que tienen que hacer frente a su falta de experiencia con formación especializada. A muy poca distancia se sitúan los de entre 24 y 29 años (59,3%) y los que se encuentran en el grupo de edad de 30 a 44 (52,5%). En el lado opuesto, se sitúan los trabajadores con edades comprendidas entre los 45 y los 65 años de edad (49,3%), que supone el 50%.
Además, el nivel de formación tiene incidencia real en la vida profesional y se convierte en un factor determinante en materia salarial. En 2009, el 21,6% de los profesionales con un nivel de estudios superior pertenecía al intervalo más elevado de remuneraciones, según datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística.
¿Eres de los que haces cursos de formación o piensas que al tener trabajo ya no son necesarios? ¿Te formarías en tu propia área o cambiarías?
Mierda de pais que hace falta titulo para todo.Padecemos titulitis!
# 1, Anónimo
Titulo, experiencia, disponibilidad para viajar y 4 idiomas.
Sólo hemos ganado en que ya no hay que tener la mili hecha.
Entiendo que se acredite una formación después de años trabajando en un oficio. Antes, no había tantas oportunidades de estudiar.