“Los salarios no están bajando en España, sino moderando su crecimiento” esta es la frase que ayer levantó carcajadas en el congreso y polémica en la calle. Y es que Montoro no da puntada sin hilo, la frase es una verdad-mentira. Verdad porque los datos le dan la razón (el INE así lo indica) pero mentira porque los datos no reflejan la realidad, no reflejan la subida de impuestos, no tienen en cuenta la inflación, no valora las horas extras no pagadas que muchos hacemos… en definitiva, la verdad, de la buena es que los salarios no están bajando pero el poder adquisitivo si y personalmente entre un buen salario y un buen poder adquisitivo, me quedo con lo segundo, será por eso que a los políticos les gusta tanto el poder… el adquisitivo y el otro.
Como aquí sabemos, que el tiempo es dinero, os lo ahorramos haciendo el resumen de lo ocurrido esta semana en los blogs de empleo:
La edad real de jubilación supera los 64 años por primera vez. Desde CincoDías nos muestran cómo en 2005, en plena expansión de la economía española, los trabajadores se jubilaban de media a los 63,6 años. El aumento del gasto en pensiones en aquel momento no era un problema inmediato porque el empleo –y, por tanto, los ingresos de la Seguridad Social–, crecía por encima del 3% anual y el sistema registraba superávit cercanos al 1% del PIB. Sin embargo, desde 2006, aunque aún no se veía la crisis en el horizonte, los expertos ya dieron la voz de alarma sobre el incremento de gastos del sistema de pensiones a medio y largo plazo y empezaron los ajustes. Entre otros, se comenzó a endurecer la jubilación parcial y se crearon incentivos a la prolongación de la vida laboral. Y uno de los objetivos de todo esto era conseguir retrasar la edad efectiva a la que se jubilan los españoles. Solo entre enero y agosto de 2013 se ha acelerado este retraso de la edad real de jubilación hasta los 64,2 años.
Un caso de éxito: El cartero que se hizo de oro desde su apartamento en Manhattan: Chris Johnson trabajaba de cartero en Manhattan y tenía una gran pasión: los gagdets. Era uno de esos frikis que no dudaban en ponerse en la cola de madrugada en la Apple Store de turno ante el lanzamiento de un nuevo iPhone. Fue precisamente en una de estas esperas al raso cuando le sobrevino una reflexión: ¿por qué toda esa gente hacía cola? ¿cómo podría aprovecharse del tirón de un producto como el iPhone? Planteadas estas cuestiones, decidió crear una tienda on-line de accesorios para el iPhone. Estamos hablando de 2011, cuando la web estaba ya surtida de cientos de negocios similares y de grandes dimensiones. Sin embargo y con poco que perder, Johnson continuó con su peregrina idea. No cabe duda de que los bajos costes de arranque de la plataforma para crear tiendas online Shopify facilitaron las cosas: por adquirir una cuenta apenas pagó 150 dólares, y donde sí se puso el asunto un poco más serio fue en el desembolso inicial de stock: 2.500 dólares en pequeños cables y cargadores para el terminal de Apple. El negocio coincidió en el tiempo con el tirón de Kickstarter. El crowdfunding se puso de moda de la noche a la mañana y esto supuso un claro punto de inflexión para su negocio: ByteMyApple.com. Johnson fue hábil a la hora de simplificar y subcontratar todo aquello que alguien podía hacer mejor que él y desde luego, a menor coste: mantuvo su tienda en Shopify y la gestión del pago la delegó en Paypal. Su negocio en la red se convirtió en el lugar ideal para comprar rarezas y accesorios alternativos, y el bullicioso ritmo de Kickstarter era un semillero perfecto para que el catálogo ofreciera siempre el último grito en este boyante mercado. Tacita a tacita nos situamos en 2013, y hace ya tiempo que Johnson cambió el reparto de sobres por el clic del ratón. Este año espera facturar 500.000 dólares y como gran novedad, incorporar su primer empleado, que compartirá el entusiasmo de este emprendedor entre las cuatro paredes de los 50 metros cuadrados de su estudio de Manhattan.
Aragón, País Vasco y Murcia, las comunidades donde más trabajadores ocupados buscan empleo. Desde Randstad han analizado el mercado laboral desde la óptica del demandante de empleo ocupado, tanto a nivel nacional como autonómico Del análisis también se extrae que las mujeres mayores de 25 años son el colectivo profesional que, a pesar de contar con un trabajo, está predispuesto a obtener uno mejor o compatibilizarlo con el actual (pluriempleo). De esta manera se aprecia que el 16,2% de las mujeres ocupadas, frente al 14,4% de los hombres en la misma situación, son demandantes de empleo.
Esta semana, en el blog: Cosas que un líder no puede hacer. Aunque parece fácil y obvio, no siempre se cumple y es que un líder nunca debería: Estar siempre “ausente”, Acomodarse, Quejarse continuamente; Engañar; Actuar como un dictador; Ignorar la verdad; Hacer algo sabiendo que está mal; Tener delirios de grandeza…., entre otras cosas. ¿Qué más crees que un líder no puede hacer?
Os deseo muy buen fin de semana a todos!