Hoy no es tu día. Ya te has levantado con mal pie: se te ha caído el café, has pillado atasco o el transporte público funcionaba fatal; has pinchado una rueda, no había forma de levantar a tus hijos… cualquier cosa puede dar lugar a que no comiences con buen pie. Empiezas el día viéndolo todo negro y no te puedes concentrar en el trabajo.
Tal vez si te paras a analizarlo, son pequeñas tonterías que no tendrían por qué afectarte, pero qué le vamos a hacer! Te afectan más de lo que te gustaría.
Según Marisa Navarro, autora del libro “La medicina emocional”, la clave para ser felices en el ámbito laboral, no reside en el trabajo que realizamos, sino en la actitud que se mantenga al respecto.
Para muchas personas un empleo con el que no se sienten felices se convierte en motor de generación de emociones negativas. En este sentido, “un estado emocional negativo producido por el ámbito laboral, teniendo en cuenta la cantidad de horas y días que pasamos en el trabajo, puede ser un potenciador de enfermedades psicosomáticas o de otra índole”, explica la doctora. Por ello, las dolencias que más se producen en personas que desarrollan estados de negatividad suelen ser las mismas que se derivan de situaciones de estrés, como las relacionadas con el sistema digestivo. “También son comunes, en las personas que en su trabajo están totalmente desmotivadas y tristes, las dolencias relacionadas con el sistema muscular, migrañas y cefaleas tensionales, así como problemas dermatológicos” asegura Navarro.
En el portal Inc.com reconocen que sentirse así es más frecuente de lo que parece. «Esos días en los que parece que nada puede ir peor pueden encararse de dos maneras, huyendo con el rabo entre las piernas o mantener la motivación a raya focalizando nuestra atención en el premio final; cuando las cosas se ponen realmente difíciles así es como se puede capear el temporal».
¿Qué puedes hacer para permanecer motivado cuando tienes uno de esos días tan negros?
Fingir hasta que lo consigues
Cuanto más haces algo, incluso si solo estás comenzando, más puedes mejorar. De hecho, se trata de una verdad aplicable a casi todo, desde la práctica de un deporte hasta fingir confianza con tu lenguaje corporal hasta que realmente se convierte en confianza. «Cuando las cosas se ponen difíciles recuerda esto: si piensas que no tienes las habilidades o conocimientos para hacerlo, sigue adelante y finge que sabes lo que haces. Lo que realmente sabes que puedes hacer te sorprenderá».
Pequeños pasos
«El éxito no es una loca carrera hasta la línea de meta» Como dijo Martin Luther King, Jr.:»Si no puedes volar, corre. Si no puedes correr, camina. Si no puedes caminar, arrástrate. Pero hagas lo que hagas, tienes que seguir adelante». Es fácil mirar los pequeños progresos, apenas medibles, y perder toda tu motivación, pero son esos días difíciles en que el progreso es más lento los que pueden conducir al éxito. «Recuerda que cualquier avance hacia adelante sigue siendo el progreso, sólo mantén tu vista en el premio».
Se apasionado
Si tu fuerza de voluntad se está consumiendo, no te preocupes: la fuerza de voluntad no es algo que se tiene en cantidades ilimitadas. «Los psicólogos comparan la fuerza de voluntad con un músculo: se puede sobrecargar con el tiempo y verás que te agotas si lo usas demasiado, de ahí que necesites centrarte en tu pasión para salir adelante». «La pasión es la energía: siente el poder que viene de centrarse en lo que motiva», dijo una vez Oprah Winfrey. No importa lo frenético que sea tu día, céntrate en la visión que te impulsó desde el principio.
Come
¿Sabías que tener hambre también dispara los niveles de estrés y provoca que tu motivación caiga en picado?. Cuando tienes hambre, todo lo estresante se multiplica. Al mismo tiempo, la alimentación suele ser la última cosa en tu mente cuando la jornada de trabajo se convierte en una locura. «Cuando todo es un caos, puedes rebajar el estrés con un aperitivo o con una comida completa. Incluso si no tienes tanta hambe, un poco de comida puede despejar tu mente, liberar endorfinas y aportarte la energía para manejar el día.
Ve a por ello
Elon Musk tiene días frenéticos mientras trabaja para revolucionar toda la industria automotora o trata de aterrizar una nave espacial en Marte. «En lugar de destruir una pelota antiestrés o cancelar su próximo lanzamiento de un cohete, pone su mejor cara y va a por la enorme carga de trabajo que le espera». «Ir hacia lo que te molesta podría parecer contradictorio o completamente aterrador, pero tiene sentido. «Si tu carga de trabajo te molesta, postergarla es probable que sea todavía peor, así que céntrate en tu trabajo y en lograr que se haga; tu mente estará centrada en el trabajo y no en preocuparse por ello».
Respira
«Aquellos programas de televisión no estaban tan lejos de la realidad cuando representaban a alguien hiperventilando en una bolsa de papel marrón. La respiración (la manera correcta) es la mayor clave para mantenerse tranquilo cuando las cosas se tensan». Como Alan Watkins explica en su libro «Coherence: The Secret Science of Brilliant Leadership», el ritmo y suavidad son la clave, al igual que sucede con los movimientos de baile.
¿Qué haces tú para mantener la motivación en un mal día?