Hay días que por muchas horas que pasas en la oficina, cuando sales, tal vez tengas la sensación de no haber hecho nada y eso que no has parado en todo el día. ¿No te ha pasado esto nunca?. La verdad es que es un poco frustrante, porque son días en los que te sientes que has sido muy poco productivo.
Tengo claro que es falta de organización. El día es muy largo y todos tenemos unas horas en las que somos más productivos que en otras. Hay que buscar esas horas y organizar el tiempo para sacarles el máximo partido. La cuestión es, ¿cuáles son mis horas más productivas?
1. Haz un registro durante tres días para ver qué es lo que haces a lo largo del día. Durante esas 72 horas, cuando estés en el trabajo, programa una alarma cada 1-2 horas. Cuando suene, haz rápidamente el siguiente seguimiento:
- La hora exacta del día.
- La tarea en la que estás trabajando.
- ¿En qué momento te has sentido más productivo? siendo el 100% el momento más productivo y 0% los momentos en los que estás haciendo grandes esfuerzos para trabajar.
- ¿Cómo es el esfuerzo, en una escala de uno a 10?, siendo 10 «sin ningún esfuerzo» y 1 «muchísimo esfuerzo».
Repite este proceso hasta el final de la jornada de trabajo, y durante los siguientes dos días.
2. Después de los tres días, analiza los datos, para ver cuándo tienes las horas más productivas y las menos productivas. Por ejemplo, tal vez identifiques que por las mañanas, de 9 a 13 eres muy productivo y te da tiempo a hacer más cosas que en cualquier otro momento del día. De 13 a 16 eres muy poco productivo y te das cuenta de que te cuesta mucho concentrarte y de 16 a 18 tienes una productividad normal.
3. Una vez que tienes los datos, úsalos con inteligencia. Haz el trabajo importante y que requiera más concentración y atención en tus momentos productivos, y deja el resto de tareas para momentos de menor concentración. Eso hará que tu productividad aumente y que te sientas más satisfecho al ver que haces y acabas más cosas (el truco está en acabar no en empezar y dejar a medias).
4. Conoce en qué pierdes el tiempo. Son esas tareas que supuestamente te iban a llevar 10 minutos y sin darte cuenta, has perdido media mañana. Suelen ser tiempos que pasas en internet y redes sociales, o esos cafés que eran de 5 minutos y se convierten en media hora…. Averigua cuánto tiempo empleas al día en esas actividades, los resultados te sorprenderán.
Ya lo tienes. Ahora sólo te falta ponerlo en práctica!
Y tú, ¿sabes cuándo eres más productivo?
eso k lo aga mi jefe .que para eso le pagan