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El Tesoro se reunió ayer por la mañana con una veintena de inversores institucionales para prsentar las bondades de la inversión en deuda pública española y explicar las últimas reformas en materia laboral, fiscal y financiera que ha llevado a cabo el Ejecutivo.
En una reunión organizada por Citibank, el secretario del Tesoro, Íñigo Fernández de Mesa, se mostró muy optimista con la entrada de inversión extranjera en la adquisición de deuda pública. Adelantó, además, que, en las próximas semanas, la institución estrenará una emisión de hispabonos, títulos de deuda de las comunidades autónomas que contarán con el aval explícito del Gobierno.
Tal y como comentaron ayer los asistentes al encuentro, una emisión de estas características permitirá a las autonomías financiarse a tipos de interés más asequibles y evitará colocaciones con poca demanda como la llevada a cabo por el Gobierno de Castilla y León el pasado martes, en la que sólo colocó 53 millones. "No tiene sentido que las regiones capten dinero ofreciendo unos tipos de interés tan elevados, ya que, en realidad, este sobrecoste lo pagamos todos con nuestros impuestos", explica el directivo de unas de las firmas asistentes al encuentro.
Los creadores de deuda pública reconocen que las últimas emisiones de las CCAA han generado cierto malestar en el Tesoro. Especialmente la de Castilla y León, pero también la de Madrid. Pese a que esta comunidad consiguió captar 665 millones, en el organismo público han considerado que se pagó precios demasiado elevados (200 puntos básicos sobre la deuda pública española al mismo plazo). Fernández de Mesa no precisó a través de qué instrumento lanzarán los hispabonos, pero señaló que no se hará a través del ICO.
Los asistentes al evento, principales compradores de deuda pública, auguran un gran éxito de estos títulos. "Se trata de una medida fundamental para que corrija algo este mercado. Hoy (por ayer) había papel de Cataluña un plazo de tres años cotizando con un diferencial de 450 puntos básicos sobre la deuda pública española", apuntan fuentes financieras.
De Guindos ya se mostró partidario la semana pasada a buscar este tipo de soluciones. "En estos momentos de dificultad de acceso de muchas comunidades autónomas y ayuntamientos a los mercados de capital, que está llevando a pagar sobrecostes importantes, es necesario que pensemos en la posibilidad de amortización de las emisiones de diferentes administraciones públicas", añadió.
Según sus cálculos, las autonomías se habrían ahorrado 1.000 millones si en sus emisiones de deuda no tuvieran que pagar a los inversores más intereses que los que ofrece el Tesoro Público.
En una reunión organizada por Citibank, el secretario del Tesoro, Íñigo Fernández de Mesa, se mostró muy optimista con la entrada de inversión extranjera en la adquisición de deuda pública. Adelantó, además, que, en las próximas semanas, la institución estrenará una emisión de hispabonos, títulos de deuda de las comunidades autónomas que contarán con el aval explícito del Gobierno.
Tal y como comentaron ayer los asistentes al encuentro, una emisión de estas características permitirá a las autonomías financiarse a tipos de interés más asequibles y evitará colocaciones con poca demanda como la llevada a cabo por el Gobierno de Castilla y León el pasado martes, en la que sólo colocó 53 millones. "No tiene sentido que las regiones capten dinero ofreciendo unos tipos de interés tan elevados, ya que, en realidad, este sobrecoste lo pagamos todos con nuestros impuestos", explica el directivo de unas de las firmas asistentes al encuentro.
Los creadores de deuda pública reconocen que las últimas emisiones de las CCAA han generado cierto malestar en el Tesoro. Especialmente la de Castilla y León, pero también la de Madrid. Pese a que esta comunidad consiguió captar 665 millones, en el organismo público han considerado que se pagó precios demasiado elevados (200 puntos básicos sobre la deuda pública española al mismo plazo). Fernández de Mesa no precisó a través de qué instrumento lanzarán los hispabonos, pero señaló que no se hará a través del ICO.
Los asistentes al evento, principales compradores de deuda pública, auguran un gran éxito de estos títulos. "Se trata de una medida fundamental para que corrija algo este mercado. Hoy (por ayer) había papel de Cataluña un plazo de tres años cotizando con un diferencial de 450 puntos básicos sobre la deuda pública española", apuntan fuentes financieras.
De Guindos ya se mostró partidario la semana pasada a buscar este tipo de soluciones. "En estos momentos de dificultad de acceso de muchas comunidades autónomas y ayuntamientos a los mercados de capital, que está llevando a pagar sobrecostes importantes, es necesario que pensemos en la posibilidad de amortización de las emisiones de diferentes administraciones públicas", añadió.
Según sus cálculos, las autonomías se habrían ahorrado 1.000 millones si en sus emisiones de deuda no tuvieran que pagar a los inversores más intereses que los que ofrece el Tesoro Público.