Por desgracia la experiencia me ha mostrado que la inmensa mayoría de las personas que se acercan a los mercados con la idea de conseguir un sueldo de él haciendo trading con productos derivados no sólo no ganan dinero, además acaban disminuyendo su capital. Por supuesto la formación es importante pero el principal error es psicológico porque eso pasa, sobre todo, por falta de disciplina. Lo que más cuesta con diferencia es asumir pérdidas: asumir los errores y pagar un coste moderado por ello en teoría no parece tan difícil pero en la práctica suele ser el muro en el que se estrellan los sueños de muchos aspirantes a traders. Algunos libros, algunos cursos de bolsa, algunos consejos… son muy positivos pero en una competición por conseguir beneficios en los que los principales contrincantes son profesionales con más experiencia, medios, dinero e información es muy difícil vencer sin haber perdido muchas batallas antes… y a veces no se tiene el suficiente capital para completar la formación.
Por contra, invirtiendo en acciones de bolsa como un plus de rentabilidad para los ahorros mucha gente ha ganado dinero, incluso con muy poco estudio y a veces siguiendo consejos de gente poco preparada. Esto se debe a dos factores principales: lo normal estadísticamente es que la bolsa suba porque los activos con el tiempo, aunque sólo sea por el efecto inflación que hace que el dinero cada vez valga menos, elevan su precio y dos, porque la tendencia de la bolsa española desde que se popularizó hace 20 años ha sido la mayor parte del tiempo alcista ya que España ha vivido un milagro económico que han sabido aprovechar muy bien muchas grandes empresas, algunas de ellas con mucho peso en el mercado bursátil. Además, España en muy pocos años pasó de estar en la cola de Europa en todos los sentidos a, por ejemplo, tener la misma calificación crediticia que Alemania lo que atrajo mucha inversión extranjera ya que ofrecíamos una muy buena relación alta rentabilidad/bajo riesgo.
Por desgracia, muchos se han quedado en aquellos años y no han sabido reaccionar ni a la bajada global posterior a los máximos históricos de finales de 2007 ni, sobre todo, al des-acople de nuestra bolsa respecto a las principales que ocurre desde comienzos de 2010 (con el Ibex en 12 mil) por la crisis de deuda en la €zona. Con todo, si son inversiones realizadas con un dinero que no se necesita y a pesar de que la inmensa mayoría si no hubiera utilizado ese principio, a día de hoy no estarían perdiendo tanto, en muchos prevalece aquello de que a largo siempre sube y que es cuestión de tiempo que recupere. Es un error, siempre hay que tener un límite en el que cortar las pérdidas y no empecinarse porque incluso aunque alguna vez recuperen lo perdido el coste de oportunidad, lo que hubieran podido ganar si esa liquidez la hubieran tenido disponible, es muy caro. Y todo esto es hablando en general porque hay valores que se sabe que jamás volverán por donde solían o que directamente han desaparecido y mejor no doy nombres.
Para invertir en bolsa mi consejo es muy sencillo: hay que hacerlo a favor de tendencia, con un dinero que no se necesite y un horizonte de largo plazo. Lo típico de “voy a comprar para vender 1€ por encima pero si empiezo a perder dinero me las quedo hasta que recupere” me parece un error. Para detectar cuando una tendencia es alcista hay muchos sistemas y aunque yo uso el cruce del cierre mensual con la media de los 12 meses anteriores (que por ejemplo me indicó que había que comprar S&P500 en enero de 2012 a 1.312) para elegir el momento exacto, creo que la propia observación directa de la evolución del precio sirve. El problema está en la elección de valores concretos, no porque no se pueda detectar la tendencia, sino porque necesitamos no sólo saber eso, también si es un sitio seguro en el que confiar nuestros ahorros. Por ejemplo, Pescanova estaba en tendencia alcista antes de que se destapara el fraude… La empresa más grande puede resultar un bluf por eso prefiero operar en índices o en fondos que replican índices pero eso ya es cosa de cada uno, es evidente que la seguridad absoluta no existe y yo soy especialmente desconfiado. También lo soy con la idea de invertir en España porque veo el fin de la crisis muy lejano y creo que sigue habiendo posibilidades de que salgamos del € por lo que, habiendo otras opciones disponibles, a día de hoy me parece arriesgado. Eso sí, este podría ser el cuarto año consecutivo de bajada del Ibex, hemos perdido mucho diferencial con otros mercados y se ha ido mucha inversión extranjera pero, como ya pasó en 2012, un rebote espectacular completamente especulativo tras un verano presumiblemente bajista puede ser posible.
En resumen, sigo sin entender por qué es tan popular la inversión bursátil, por qué tantos cientos de miles de españoles confían sus ahorros en algo tan peligroso, tan imprevisible y tan poco rentable en relación a su riesgo. De los 98 fondos de renta variable española que tienen clasificados en esta prestigiosa web, 97 han dado pérdidas, en media, los últimos 5 años (y los dividendos ya están incluidos no como en el Ibex) por lo que tampoco es una cuestión de profesionales (los menos malos lo son básicamente porque apostaron más por Inditex) o amateurs, es que simplemente ha sido una mala inversión que ni siquiera ha servido para protegerse contra la inflación. Si lo miramos a 10 años el resultado de los pocos fondos que existían hace una década es positivo por el rally alcista burbujil 2003-2007 pero en media similar a lo que hubiera dado un bono español de renta fija. Y si nos fijamos en el comportamiento de las principales bolsas europeas desde una fecha más concreta como el año 2000 el resultado tampoco es positivo, lo de que “a largo la bolsa siempre sube” caducó en el último cuarto del siglo XX y eso a pesar de los máximos históricos que acaba de marcar la mayor bolsa del mundo:
Comprando deuda pública (incluso letras del tesoro) o con un depósito en el banco se hubiera obtenido más rentabilidad sin riesgo… Y mejor no hablar del IBEX ni siquiera incluyendo dividendos.