Hemos hablado mucho en este blog sobre las entrevistas de trabajo. Cómo prepararlas, qué ropa llevar, qué preguntas te pueden hacer, cosas que no debes hacer durante la entrevista, cómo acabar la entrevista… Parecen demasiadas cosas, pero hoy en día, todo es poco si quieres ser el candidato perfecto para ese puesto.
Posiblemente te harán alguna pregunta relacionada con tu formación, con tu experiencia laboral en otras empresas y otros puestos que hayas desempeñado, preguntas relativas a la empresa y al puesto que estás optando, tus debilidades y fortalezas… y al final, en la mayoría de las entrevistas de trabajo, surgirá la pregunta de: “¿Tienes alguna pregunta?”
Aparentemente es una pregunta sencilla, sin trampa ni cartón, pero la realidad es otra, ya que es muy fácil meter la pata. Un error es decir que no tienes ninguna pregunta, ya que demuestra que no tienes interés por la empresa. Otro error es hacer preguntas sobre cosas que se pueden encontrar con una sencilla búsqueda en internet, ya que eso demuestra que no te has informado suficientemente sobre la empresa.
Por el contrario, hacer buenas preguntas a la persona que te está entrevistando, va a dejar una impresión positiva de ti. Además de permitirte a ti mismo conocer más sobre la empresa y sobre el puesto de trabajo que vas a desempeñar. Recuerda que tú debes ser el candidato perfecto para ellos, pero la empresa también tiene que ser la perfecta para ti.
¿ Me puede describir un día normal de trabajo? Podrás percibir más claramente en qué va a consistir tu día a día. También puedes preguntar qué se espera al cabo de un mes, así tendrás una visión más amplia.
¿Se trata de un nuevo puesto o es una vacante? Si se trata de un nuevo puesto, debes preguntar el motivo de por qué fue creado, así podrás saber mejor lo que se espera de ti. Si se trata de una vacante, sería bueno saber por qué quedó vacante: si la persona que estaba antes fue despedida, ha cambiado de puesto, o si simplemente se ha ido de la empresa. Te permitirá detectar posibles problemas.