Estas últimas semanas han saltado a la opinión pública varias noticias sobre espionaje en nuestro país, desde casos políticos en Cataluña, el de Guardiola a Piqué y el más reciente, el de la contratación por parte de Urdangarín de un hacker que anteriormente había trabajado para el CNI. Nos puede parecer algo extraordinario, pero desde hace tiempo el espionaje empresarial era una forma normal de hacer negocios, antes de que los derechos de autor y la protección con patentes pusieran en juego el largo brazo de la ley, no obstante hay algunas empresas que siguen adquiriendo secretos e información comercial por cualquier medio que sea preciso.
Veamos 10 grandes casos de espionaje industrial que dejan el caso Piqué al nivel de Mortadelo.
Inmerso en los secretos del té
En 1800, Gran Bretaña estaba sedienta de té, una infusión monopolizada por China. Así que la empresa East India Co. basada en Londres, contrató al botánico y aventurero escocés Robert Fortune para pasar de contrabando plantas, semillas y secretos del té de China a la India, que estaba regulada por Inglaterra. Lo logró disfrazado de comerciante chino, y durante su vida la producción del té en India superó la de China.