El Lunes conocimos que el Banco Vaticano ganó 86,6 millones de euros en 2012 y teniendo en cuenta que el Vaticano tiene menos de 900 habitantes, sale a unos beneficios de casi 100.000€ por habitante así que probablemente se trata del país con la banca más saneada del mundo. Unas cifras, que en tiempos de crisis me atrevería a decir que son milagrosas. Así que hoy vamos a intentar entender, cómo es la economía del Vaticano.
Ingresos e inversiones de la Santa Sede
La Santa Sede genera ingresos provenientes del Denario u Óbolo de San Pedro, una condición del siglo VIII para donaciones recibidas de los católicos de todo el mundo. Desde particulares a diócesis, la Santa Sede recauda las donaciones a través de un departamento especial. La Santa Sede también obtiene ingresos de los intereses e inversiones de sus reservas.
Históricamente, la Santa Sede invirtió fundamentalmente en industrias italianas, ampliando su cartera entre acciones y bonos y limitando su participación en sociedades en menos del 6%. Ha invertido de manera conservadora, eligiendo comprar y mantener sociedades solventes en sectores fuertes.
Sin embargo, las inversiones más recientes han sido más internacionales, en particular, en las divisas y bonos de Europa occidental, con alguna actividad en la Bolsa de Nueva York. La Santa Sede también tiene inversiones inmobiliarias por todo el mundo, especialmente en terrenos e iglesias. No obstante, hay algunas inversiones que la Santa Sede nunca realizará, no invierte en sociedades que van contra los valores de la iglesia, como las sociedades farmacéuticas que fabrican productos para el control de la natalidad, esto al menos directamente ya que indirectamente es probable que lo haga (posiblemente sin saberlo)
En 2012 la Santa Sede tuvo un déficit de 18,4 millones de dólares en 2012. Los funcionarios culpan a la débil economía europea y al coste de pagar a sus 2.832 empleados, así como a la difusión de la fe católica a través de sus diversos medios de comunicación.
Aunque los dos últimos Papas han intentado que el país fuera más transparente, sus finanzas siguen siendo un misterio, y algunos consideran que los números son más generales que precisos y auditados, de hecho el balance que conocimos el Lunes ha sido el primero en publicarse. No obstante es casi imposible medir la salud financiera de la Santa Sede, aunque a los que estudian a la iglesia les caben pocas dudas acerca de que esta tiene reservas considerables.
Ingresos y banca de la ciudad del Vaticano
El Vaticano, en cambio, recibe ingresos de empresas tradicionales más imponentes. No hay actividad formal para incentivar el turismo, pero el Vaticano también percibe ingresos por las entradas a los museos, visitas, sellos y monedas muy codiciados y la venta de publicaciones.
En enero, el Banco de Italia realizó inspecciones rutinarias y detectó que el Deutsche Bank Italia no contaba con una autorización adecuada para procesar operaciones de tarjetas de crédito en nombre del Vaticano.
Cuando el Deutsche Bank solicitó permiso, se le denegó porque el Vaticano no cumplía la normativa contra el blanqueo de capitales. El Vaticano dijo que estaba haciendo todo lo posible por cumplir todas las disposiciones para restablecer el pago con tarjetas de crédito, pero hasta el momento solo se puede pagar en efectivo en las visitas.
Como veis estamos ante una economía francamente peculiar y sobre la cuál es muy complicado encontrar fuentes fiables, basta entrar en su entrada en la wikipedia para encontrarse el mensajes de “Existen desacuerdos sobre la neutralidad en el punto de vista de la versión actual de este artículo o sección” y es que nos encontramos ante un tema con fuertes sentimientos enfrentados que nos acaba arrojando más sombras que luces.