Los directores de Recursos Humanos tardan unos diez minutos, o menos, en formar una opinión, positiva o negativa, del candidato que tienen delante. Según una encuesta llevada a cabo por Accountemps, a más de 500 responsables del área de RRHH en empresas estadounidenses, el 42% de ellos sólo necesita entre seis y diez minutos para llegar a una conclusión sobre un candidato.
Vaya, no parece mucho tiempo, sobre todo teniendo en cuenta que el principio es cuando más nervioso está uno. De ahí la importancia de haberse preparado bien la entrevista. Si vas con los deberes hechos, conseguirás llegar mucho más relajado y dejar una mejor impresión.
Ya sabemos que hay que causar una buena primera impresión, pero no vale sólo con ese primer impacto, hay que conseguir mantener la atención del entrevistador a lo largo de toda la entrevista, no puedes bajar la guardia. Hay ciertas cosas que jamás deberías hacer o decir. En un post anterior, ya hablamos de cosas que no deberías hacer en la entrevista. Hoy quiero dejaros algunas cosas que no debes decir en la entrevista. He aquí algunas de ellas:
Criticar o hablar mal de antiguos compañeros o jefes
Suele ser lo más recurrido cuando te preguntan por qué te despidieron de tu antiguo trabajo: “mi jefe era un incompetente” o cosas por el estilo. No lo hagas. No uses un lenguaje denigrante al referirse a los antiguos compañeros, empresa o jefe. Da motivos razonazonados y evita los descalificativos y excusas. Te considerarán una persona conflictiva.
Mentir sobre tu curriculum
No caigas en este error. Si realmente no hablas bien el inglés, no digas que tu inglés es fluido. Tarde o temprano te descubrirán y puedes incluso perder tu empleo. Si mientes sobre tus anteriores puestos de trabajo, te pueden pillar con una simple llamada que el entrevistador haga a tu antigua empresa. Saldrás perdiendo.