Hay cosas que el pequeño ahorrador no comprende o, por lo menos, no alcanza a entender. Y entre ellos me encuentro yo mismo. A ver si entre todos podemos explicarnos las cosas que hacen los bancos con el dinero que custodian.
No voy a entrar en el detalle de cuáles son, pero resulta curioso que por ejemplo, una entidad que se ha visto obligada a ampliar capital recientemente y que fue de las primeras en reducir la remuneración a sus ahorradores, ahora esté dispuesta a entrar a ayudar a Pescanova, ejemplo claro de cómo se ha dilapidado dinero de las entidades financieras y público (en ayudas) durante más de una década. Para pagar menos a los ahorradores o para denegar créditos a las pymes estaban dispuestos, pero para ayudar a los que lo han hecho mal, también lo están.Cada día tenemos menos ahorros en nuestras entidades financieras según va el nivel de vida, a lo que se le une que cada vez nos pagan menos por ellos. Todo, según nos dicen, para que el margen de las entidades financieras mejore y puedan devolver las ayudas recibidas (cosa que me permitan poner en duda). Y ahora resulta que algunas entidades financieras, de las que llevan cerrando el grifo de la financiación a las pymes y familias unos cuantos años, vemos que se ponen al servicio de las grandes empresas que están teniendo problemas.
Otra entidad de las que paga menos a sus ahorradores, ‘para mejorar’ sus márgenes, ahora opta por refinanciar la deuda a empresas como el Grupo Planeta o como Mango, ¿con qué dinero lo hace? ¿con el que se ha negado a las pymes o el que se ha negado a las familias o con lo que se ha reducido la remuneración a los ahorradores?
Una pequeña empresa cierra por falta de financiación porque una AAPP tarda en pagarle unas facturas, pero las grandes a refinanciar las deudas gracias al ‘compañerismo’ de las entidades financieras que están siendo ‘aguantadas’ por los pequeños ahorradores. ¿Alguien me puede explicar para que hay un regulador financiero que debe de velar por los intereses de los ciudadanos?
Si a esto le unimos le hecho de que como alternativa de la bajada de rentabilidad de los depósitos bancarios, el Estado ahora permite al pequeño ahorrador contrate directamente deuda pública sin la necesidad de intermediario financiero, queriendo que sea una alternativa más rentable que los depósitos, ¿no significa eso que busca que los pequeños ahorradores contribuyan a levantar el déficit público adquiriendo deuda que hasta hace poco la compraban las entidades financieras?
No me extraña que el pequeño ahorrador no sienta seguridad para dejar su dinero en algún producto de los que hay a su disposición en estos momentos en el mercado.
Pero lo que sí está claro es que en algún sitio tiene que poner sus ahorros el pequeño ahorrador y a la dualidad de siempre de riesgo/rentabilidad típica de los productos financieros, debe de añadirle la riesgo/rentabilidad de la entidad en la que piensa dejar sus ahorros a ‘buen recaudo’. De hecho el índice iAhorro tiene en cuenta diferentes factores, como la liquidez o la solvencia de la entidad, además de la rentabilidad del producto.
¿Qué diferencia hay en dejar el dinero en una entidad financiera capitalizada por el Estado en la que se garantizan hasta 100.000 euros en caso de quiebra por titular y entidad o invertirlo en deuda pública cuando parte de ese dinero se está regalando a las entidades financieras para que sigan maltratando al pequeño ahorrador?
Distintos canales que llevan al ahorro del pequeño ciudadano al mismo lugar, con lo cual, ya que el riesgo no deja de ser similar en ambos casos, lo más lógico es que el ahorrador escoja el producto más rentable ya que, por lo menos, se le remunere mejor por el riesgo que asume.
José Luis del Campo, colaborador de iAhorro.