El huella a nivel turístico de que Madrid fuera la ciudad escogida para albergar los JJ.OO de 2020, “sería enorme”, especialmente en el sector hotelero que experimentaría un gran aumento de la oferta, según un estudio elaborado por Jones Lang Lasalle.
“El huella a nivel turístico de los JJ.OO en una ciudad como Madrid sería enorme”, indicó el director para España y Portugal de Jones Lang Lasalle Hotels & Hospitality Group, que enumero la cantidad de atractivos con los que cuenta la capital de España: centro histórico, museos, la Gran Vía, etc.
De esta forma, los efectos a corto plazo que la organización de los Juegos podría producir en el mercado hotelero un crecimiento de la oferta de habitaciones a medida que se aproximara la fecha del evento así como de las tarifas medias.
No obstante, también se produciría un descenso en la ocupación durante el año de los juegos para recuperarse tras el periodo, y un rendimiento diferente dependiendo del ciclo económico o de la magnitud de la oferta creada.
Por otro lado, el estudio alerta de que unas ciudades han tenido más éxito que otras a la hora de aprovechar el efecto catalizador del evento deportivo una vez finalizado.
Así, “obtener beneficios a largo plazo dependerá de mantener un entorno económico competitivo, de la calidad de las atracciones turísticas, de la habilidad para vender la experiencia olímpica y del nivel de infraestructura turística creada para los Juegos”.
Barcelona es un ejemplo de ello. El turismo generado en la ciudad durante el año de los Juegos llegó al 18,9%, pero los verdaderos beneficios se cosecharon al año siguiente, con el aumento de llegadas de turistas internacionales de un 43,3%.