El 23 de abril es una fecha especialmente curiosa ya que se celebra el Día del Libro entre otras cosas porque se dice que ese día murieron los dos considerados mayores genios literarios de la lengua inglesa (William Shakespeare ) y la española (Miguel de Cervantes) en 1616… aunque no sea cierto porque Cervantes fue enterrado el 23 pero falleció el 22 y el inglés en realidad murió el 3 de mayo, sólo que en el antiguo calendario juliano –desfasado por no incluir un bisiesto cada 4 años- esa fecha era el 23 de abril. También ese día del 303 dicen que murió San Jorge lo que se celebra en muchos lugares, destacando en España por ser el patrón de Aragón y ser en Cataluña el día en el que por Sant Jordi los hombres regalan una rosa a las mujeres y éstas a los hombres un libro. Sin embargo, para mi esta onomástica de 2013 es especial porque es cuando cumple 65 años mi amigo Antonio Tavera, el entrevistado de hoy, que nos contará alguna cosa de Cajasur, entidad en la que ha trabajado durante décadas.
-¿Cómo nace Cajasur?
Fusionaron a la Caja Provincial de Ahorros de Córdoba con el Monte de Piedad de Córdoba el 1 de enero de 1995. Yo, como cordobés, creía que era lo mejor para Córdoba, para Andalucía, para los empleados, porque a pesar del solapamiento que, indudablemente se producía, era mejor que hacerlo con otra Caja foránea.
Estuve 25 años trabajando en Caja Provincial donde ingresé por oposición y 12 en la Cajasur resultado de la fusión. Y 5 años de prejubilado que han sido el colofón gratificante de 49 años cotizando a la Seguridad Social. En todos aprendí y así pude aclarar mis ideas y actuar en consecuencia. Y hoy puedo afirmar que tuve una inmensa suerte en mi devenir laboral. Comencé con ilusión como casi todo el mundo. La fusión (hicieron un vídeo al que llamaron “fusión de voluntades”) fue para casi todos los “absorbidos” un trauma, porque la plantilla se dividió en absorbentes y absorbidos. El choque cultural resultó brutal. Nos encontramos integrados en una Caja en la que se dispensaba un culto exagerado al Presidente. Nadie se atrevía a criticar sus decisiones o actuaciones. Estábamos un pequeño grupo procedentes de la Caja Provincial que comentábamos “sotto voce” este sometimiento en el que se integraron los sindicatos UGT y CCOO que en el Monte de Piedad tenían escasísima representación. Allí campaba por sus respetos ASPROMONTE (dicen que fue ideado por el Presidente Castillejo) donde sus prebostes gozaban de “canonjías” y preponderancia dentro de la casa.
Y la posición de la jerarquía eclesiástica la misma de la sociedad cordobesa: mirar hacia otro lado. No hay que olvidar que un Obispo que se enfrentó al Presidente de Cajasur, acabó trasladado a Granada. Creo que a eso se le llama un arabesco lateral.
-¿Tan peculiar era Cajasur?