Hoy se produce un hecho histórico en el Reino Unido que puede cambiar la historia del país, los escoceses decidirán vía referéndum si el futuro de Escocia está unido a Inglaterra o por el contrario iniciarán caminos separados convirtiendo a Escocia en un Estado propio. Ahora mismo las tres últimas encuestas dan una ligera ventaja al “No” una ligera ventaja y se impondría con el 52% frente al “Sí” con el 48% restante. A pesar de esto, se perfilan un 14% de indecisos por lo que hay margen suficiente para un vuelco en los resultados.
Los mercados van estar atentos al proceso independentista, de hecho durante todo este tiempo el par GBP/USD que relaciona la libra esterlina con el dólar estadounidense se ha movido a golpe de encuestas. Si nos fijamos en la evolución de éste par desde finales de julio inició una sucesión de máximos y mínimos decrecientes justo cuando los sondeos estaban empezando a dar un mayor apoyo al independentismo. Es más, en las primeras encuestas del mes de septiembre, que vaticinaban el “No” por delante del “Sí” con un 54% de apoyo hicieron desplomar la libra un 3,34% desde los 1,66 dólares hasta los 1,60 dólares. Si tenemos en cuenta la evolución global de la libra esterlina desde el avance del independentismo, la caída es de un 6,56% desde sus máximos de julio en los 1,718 hasta fijar un mínimo en los 1,607 dólares. Sin embargo, las últimas encuestas favorecen al no y ha propiciado un rebote al GBP/USD hasta los 1,6258 dólares actuales.
Si hacemos un repaso a la bolsa británica, el índice FTSE 100 lleva atrapado en un movimiento lateral ascendente desde hace más de un año, teniendo como resistencia a batir los 6.882 puntos, que hasta en cinco ocasiones lo ha intentado y ha fracasado. Por contra el punto más interesante estaría en los 6.600 puntos, debido a que confluyen la recta directriz alcista a largo plazo y la recta del triangulo ascendente. Suponiendo que los resultados del referéndum generaran una especial volatilidad, si ganara el “No” muy probablemente la bolsa del Reino Unido sería capaz de traspasar los 6.882 puntos en las próximas sesiones pero en el supuesto de que el “Sí” fueran el vencedor sería muy importante que no perdiera los 6.600 puntos porque sino pondría fin a la tendencia alcista iniciada desde mediados de 2011, creando un “cisne negro” en el FTSE 100 e iniciando una fuerte corrección.