Siendo hoy 1 de julio no he podido evitar caer en la tentación de hacer un balance del primer semestre que podríamos resumir con una palabra: divergencia.
- La economía de los EUA, a pesar de los recortes de gasto público, sigue creciendo y reduciendo su tasa de paro y sí, lo hace a un ritmo impropio de una recuperación tras una crisis y la sombra de los exagerados estímulos de la FED y su posible retirada extiende un manto de incertidumbre pero, con todo, lo está haciendo bien si lo comparamos con otras áreas económicas.
- La €zona está en recesión, en máximos de deuda y paro al igual que España y por mucho que se diga que estamos en un punto de inflexión el balance de lo que llevamos de 2013 es negativo.
- Otras economías europeas como Reino Unido están superando los peores augurios pero siguen en situación delicada.
- China e India mantienen un alto crecimiento pero por debajo de su potencial.
- Brasil y Rusia no van bien muy afectados por el bajón del consumo global. Brasil está tan a la contra del resto que su banco central ha subido los tipos de interés, algo que parece inaudito en estos tiempos.
- Japón es la gran incógnita debido a los nuevos macro-programas de estímulo de su banco central avalados por el nuevo gobierno. De momento sus consecuencias han afectado más a los mercados de divisas, deuda y bolsa que a la economía real pero es pronto para hacer una valoración.
Respecto a los mercados financieros globales nada mejor que estas tablas preparadas por @_perpe_ para comprobar las principales variaciones.
De bolsa
y de materias primas (la columna YTD engloba el semestre completo)
Y para no poner más cuadros, en este podéis ver también las divisas contra el Euro. Lo que no sale es que tanto el Dow Jones como el S&P500 como el Dax alemán como el FTSE inglés han marcado máximos históricos, que aunque no lo serían si contáramos la inflación muestran que en general ha habido una euforia bursátil que no se corresponde con el crecimiento global cuyo escaso impulso ha propiciado la caída de las principales materias primas. Es quizás la mayor contradicción del año: ¿Cómo se puede defender que suben las bolsas por mejora o expectativas de mejora de la economía y que los elementos más necesarios para crear economía bajan de precio por reducción de la demanda? Y esto se ve muy claro en esta imagen en la que se aprecia que hace ya tiempo la bolsa sube mientras el índice CRB de materias primas baja
La segunda quizás sea: ¿Cómo puede ir bien –y así lo marcan las cifras macro- la economía de los EUA y a la vez romper máximos históricos el número de ciudadanos (47 millones) que necesitan los cupones de alimentos para poder subsistir? Esto también lo podemos apreciar en esta imagen: a la vez que aumentan los asalariados aumenta el número de usuarios de cupones lo que es todo un indicador de la baja calidad e insuficiencia de los nuevos empleos
En estos 6 meses también es destacable el pinchazo de la burbuja del oro aunque lo que más afecta a la economía real es la subida de las rentabilidades de la deuda en un movimiento que se inició en Japón y que parece ha marcado un punto de inflexión y un cambio de tendencia ya que se suma a la expectativa de una reducción de las compras por parte de la FED. Este temor a un menor apoyo de los bancos centrales y a un fin no demasiado lejano de la política de liquidez masiva y barata es el principal temor de los mercados financieros que tanto en bolsa como especialmente en deuda, han cotizado este año en niveles históricamente inauditos y, según pensamos algunos, de auténtica burbuja. El Ibex es la excepción, a pesar de su alta rentabilidad por dividendo y su PER por debajo de la media sigue comportándose peor que el resto de bolsas de su entorno como viene pasando desde 2010, reflejando que la confianza en España no es tan alta como algunos venden ya que también el mercado de deuda sufre del mismo mal.
Sin embargo, lo que más me ha llamado la atención de este semestre es la aparente tranquilidad ante noticias tan negativas como la inestabilidad política italiana, el corralito chipriota, las amenazas norcoreanas, la guerra civil siria, las tensiones de este país con Turquía e Israel… Es decir, que la complacencia que los mercados financieros han demostrado ante la falta de impulso económico también la están demostrando ante noticias que otros años hubieran provocado un crah duradero que en 2013 apenas se ha notado durante unos días o directamente nada. ¿Esta bajada de la volatilidad implica que los mercados son más maduros o que son más irresponsables y minusvaloran los riesgos como hicieron en 2007? Veremos…