España siempre ha sido un país asociado a la piratería. Recuerdo las amargas declaraciones de un músico de un importante grupo de rock estadounidense que en su visita a este país decía algo así como: “todo el mundo sabe que nadie compra discos en España, hasta los niños rusos, al nacer, saben que los españoles no compran discos”.
Tampoco, al parecer, somos muy aficionados a pagar por contenido televisivo. ¿Puede Netflix marcar un antes y un después en las costumbres de los espectadores españoles? Este sistema de video bajo demanda ha aterrizado por fin en España despertando enorme expectación. Pero, ¿hasta qué punto Netflix es la gran esperanza de la televisión?
Las series, la gran baza de Netflix
Dicen que vivimos la edad de oro de la series y que estas ya han superado al cine en calidad. Si hablamos de Hollywood, es cierto que las películas se parecen cada vez más a la series. De hecho, se piensa en franquicias y en trilogías antes de sacar un producto a la cartelera. Consideran que los aficionados al cine quieren continuidad, personajes y tramas que se repiten y siempre dejan una puerta abierta a una secuela.
Tal vez, el cine actual de Hollywood sea el peor de la historia y en esta debacle “artística” tengan mucho que ver la series. Pero eso es otra historia. La realidad es que las series viven un momento dulce gracias al fervor de los seguidores que devoran capítulos y temporadas sin cesar.
En este escenario, Netflix ha sido una de las principales causas del auge seriófilo. El problema es que ha tardado una eternidad en llegar a España. América del norte, Latinoamérica y diversos países europeos han recibido Netflix mucho antes que España. La recepción de esta plataforma de video en streaming en la mayor parte de zonas en las que se ha implantado ha sido un éxito.
Pero, ¿qué hay del catálogo actual en España? No es gran cosa, al menos por el momento. Daredevil , Narcos o Marco Polo son las series más promocionadas durante el lanzamiento. Pero es que House of Cards o Orange is the new black no ofrecen los capítulos de estreno porque fueron vendidas previamente a Movistar+.
Los responsables de Netflix no tienen prisa por triunfar en España, conscientes de que es un mercado difícil. Es de suponer que irán reforzando el catálogo poco a poco.
De momento, ofrecen un mes gratis y luego 9.99€ al mes y 11.99€ en versión Premium. La diferencia es que en Premium se amplía a 4 las pantallas que se puede ver al mismo tiempo y que permite visionado en UHD, en los dispositivos que tengan esta capacidad, que no son muchos por cierto.
Así las cosas Netflix arranca con el freno de mano echado y sin un catálogo de contenidos de lujo.
Yomvi, Wuaki o Filmin, sus principales rivales
Antes de que llegara Netflix, ya existían otros sistema de videos bajo demanda especializados en series y películas. Destaca, a nuestro juicio, Filmin con un importante catálogo de cine con atención especial a la producción independiente. Todo ello con una suscripción de 70€ al año en la versión Premium.
De cualquier forma, ninguna plataforma ha logrado hasta ahora una presencia muy notable en los hogares españoles. Será que todavía esperamos que una plataforma ofrezca una relación calidad-precio que merezca la pena. O que no nos gusta pagar. ¿Será Netflix la que cambie definitivamente el panorama televisivo en España? Tendremos que esperar varios meses para comprobarlo.