Antes de nada: la expresión “imprimir dinero” se ha quedado obsoleta porque en la actualidad basta con una anotación en cuenta ya que en realidad lo que significa es crear dinero de la nada. Eso es algo que puede hacer todo el que tenga poder suficiente para ello. Por ejemplo, como en su día denuncié, los bancos dueños de Metrovacesa valoraron en sus balances –con el beneplácito del Banco de España- las acciones por el triple de valor de mercado, es decir, crearon un capital que no existía puesto que si querían vender la compañía nadie pagaría ese precio. Del mismo modo, todo aquel que tenga capacidad –desde un alcalde recalificando una finca a un banco central aceptando bonos basura como colateral pasando por una empresa que infla el valor de su balance- para hinchar la valoración de algún activo, “imprime” dinero.
La gran ventaja del €, más allá del abaratamiento de los costes comerciales entre los miembros de una misma área económica, es que implicaba el fin de la manipulación monetaria cada vez que a un gobierno de un país le apeteciera. Gracias al € se iba a acabar el recurso a las devaluaciones y a la impresión arbitraria de dinero gracias a una disciplina que se basaba en unos principios básicos: el Pacto de Estabilidad y Crecimiento de 1997. Esa uniformidad de criterios para distintos países iba a permitir una estabilidad que permitiría a todos compartir una misma moneda y un mismo banco central. La idea era buena pero se aplicó mal. Primero se dejó entrar en la €zona a países que no cumplían los criterios y no por poco (por ejemplo Italia lo hizo con el doble de deuda pública respecto al PIB de lo exigido) y segundo, no se determinó con claridad cómo solucionar el que alguien se saltara las normas (quizás por eso Italia ni en años de bonanza económica hizo nada por reducir su deuda pública). Muy pronto comenzaron los incumplimientos (curiosamente de Alemania con el déficit) que se desbordaron con la crisis de 2008.
Mantener una misma política monetaria en un conjunto de países con política económica independiente es un absurdo que se resolvió con la presión política de los países más fuertes hacia los más débiles a los que obligaron a aplicar sus recetas. ¿por qué se aceptaron esas imposiciones? Porque a partir del primer rescate a Grecia se vio claramente que unos iban a necesitar ayudas de otros para poder pagar sus deudas (lo que unos años atrás se habría “resuelto” con una devaluación que supusiera una quita de la deuda externa) y efectivamente tras él se desarrollaron varios rescates más, todos condicionados a injerencias políticas externas, algo similar a cuando se pide un crédito al FMI. Y en esas estamos: una parte de la €zona está harta de poner dinero y otra está harta del precio por ese préstamo. Pero algunos defienden otra vía y piden que se imprima dinero, que se traicione el espíritu del € porque esta crisis es lo bastante grave como para hacer una excepción y porque hay que usar las mismas armas que están utilizando otras áreas económicas como los EUA o Japón. El otro día nuestro presidente Rajoy se puso del lado de los que opinan así, quizás para echar las culpas al BCE de los negatvios frutos de su gestión económica.
Imprimir dinero, aumentar la inflación, devaluar la moneda etc. no es la solución y si lo fuera Argentina sería la primera potencia mundial. Aunque sí podemos discutir si conviene en momentos puntuales ya que en esta crisis hemos visto reacciones temporales positivas a acciones de bancos centrales muy similares a las descritas. Pero es que en ese caso ya se encuentra la €zona. BCE ya ha imprimido dinero. Me explico: sin entrar en discusiones académicas sobre qué es y qué no es el dinero, es evidente que cuando BCE compró por vez primera deuda griega que nadie más quería y la incorporó a su balance como si fuera un activo que en cualquier parte te cambiarían por euros cuando no era así, estaba creando dinero de la nada. Cuando está aceptando que los bancos de Chipre puedan obtener liquidez a cambio de la deuda de su país que todos rechazaríamos si nos pagaran el sueldo con ella y por la que nadie pagaría el precio al que la valora BCE, éste está creando dinero de la nada. Es como si yo pido un crédito a un banco con el aval de un solar que vale 100 mil € y éste me lo valora como si un edificio entero estuviera construido encima y me presta 1 millón de €: está “imprimiendo” dinero. Y como dije antes, podemos aceptar que ese saltarse sus estatutos (BCE tiene prohibido financiar estados así como aceptar bonos basura como colateral hasta que cambiaron la norma) para crear dinero pudo tener un efecto temporal positivo pero es evidente que como solución no está funcionando tampoco… De hecho, aunque los últimos meses se está reduciendo por las devoluciones bancarias de las LTROs, el balance del BCE es superior incluso al de la FED (ignoro qué parte de esos activos si se negociaran en mercado abierto tendrían un valor inferior al de valoración):
Además, el balance del BCE tiene una gran diferencia respecto a los demás: todos los japoneses responden por los activos del Banco de Japón pero en la €zona unos países se juegan más que otros y aún no se sabe qué ocurrirá si un país decide salirse. El otro día le preguntaron a Draghi qué hubiera pasado con los 10 mil millones de € de riesgo que BCE tiene en Chipre si éste hubiera decidido abandonar la €zona y dijo que no contemplaba esa posibilidad, es decir no respondió… pero la duda está ahí.
Por cierto, España también ha imprimido dinero porque creó la Sareb que compró unos activos inmobiliarios que nadie más quería y los pagó con deuda emitida por sí misma y que a las entidades financieras vendedoras les ha servido para reforzar su capital, es decir, se han convertido unas casas que no eran vendibles a ese precio (si lo fueran ya se habrían vendido) en dinero que no existe. No hace mucho salió la noticia que Santander vendió unos créditos dudosos con un descuento de hasta el 98% luego el dinero de verdad siempre aparece a un precio adecuado y todo lo que no sea una transacción real, es un apunte contable, un artificio… dinero creado de la nada. Y eso lo estamos haciendo hace años en la €zona y últimamente en España, así que dejemos de acusar a los demás de hacerlo y, sobre todo, de decir que es una solución porque si lo fuera no estaríamos tan mal como estamos. Es como los que dicen que estaríamos mejor subiendo más los impuestos… ¡si ya se hace y no paramos de empeorar!