Tecnología
Con el iPhone X en la mano, su sonrisa le delataba: como un niño con un juguete nuevo. No preguntaba por las cualidades de su procesador, ni por las novedades de su cámara. No estaba interesado en el nuevo sistema operativo ni en el Face ID. Solo tenía ojos para dos cosas: la estética del terminal… y su precio. Salió de la Apple Store con la firme idea de comprarse el iPhone X… aunque tuviese que vender el bazo.
Menos en lo del bazo, se trata de una historia real, idéntica a la que vivieron millones de personas en el mundo cuando el mileurista iPhone X salió a la venta en septiembre del año pasado. Una apuesta arriesgada de la firma de Cupertino que, a la postre, ha resultado ganadora. El órdago de Apple, como siempre, ha sido recogido por Samsung.
Móviles a 1000 euros: Samsung también cree que puedes pagarlos
El precio del nuevo smartphone de Samsung, en su versión tope de gama con 8 GB de RAM y 512 GB de memoria interna, alcanza los 1259 euros, que viene a ser el suministro de cerveza de unos dos años… tal vez tres, según el grado de afición por los bares que tengamos. ¿Y qué ofrece a cambio?
Aunque cada vez que alguien denomina un dispositivo tecnológico como pepinazo muere un gatito (o dos pequeños), no cabe duda de que el Note 9 es eso: un pepino grande.
Uno de los aspectos más llamativos del nuevo terminal de Samsung es su memoria interna, que en la mencionada versión tope de gama podría alcanzar un terabyte si lo acompañamos con una microSIM de (otros) 512 GB. Una auténtica barbaridad que será bienvenido por todos aquellos usuarios acostumbrados a almacenar una gran cantidad de archivos.
Otra faceta interesante es la batería que, por supuesto, incluye la ya venerada carga rápida que viene siendo habitual en teléfonos de gama alta desde hace un tiempo. Pero, además, la batería cuenta con una capacidad de 4000 miliamperios lo que supone una considerable mejora en la autonomía.
Y luego está el gaming… Con el mercado de los videojuegos en estado de gracia, las principales compañías fabricantes de smartphones batallan por ofrecer una experiencia cada vez más satisfactoria tanto a gamers como a jugadores ocasionales. En este sentido, el Note 9 se sitúa a la cabeza de los móviles de última generación, habiendo firmado incluso un acuerdo con Epic Games desarrolladora del popular Fortnite, que será exclusivo para el terminal de Samsung.
Pero el quid de la cuestión no está ni en la batería, ni en el procesador: está en la exclusividad. Por eso el individuo protagonista de la historia con la que comienza este artículo hiperventilaba de ansiedad consumista con el iPhone X en la mano: si lograba comprarlo se sentiría perteneciente a un grupo exclusivo. Y eso es lo que también pretende Samsung con su Note 9 y su precio por encima de los 1000 euros: hiperventilar al usuario… al menos hasta que salga el nuevo Note 10 dentro de unos meses.
¿Hasta cuándo (y hasta cuánto) seguirán subiendo los móviles de gama alta?
Mientras las compañías fabricantes certifiquen que estos smartphones mileuristas son un buen negocio no hay razón para creer que la escalada de precios en la gama premium ha de detenerse.
A pesar de que Apple ha venido amagando con un iPhone barato para principios de septiembre, a buen seguro que este terminal de precio más contenido vendrá acompañado de la correspondiente evolución del iPhone X que no podrá ser más barata. Imaginemos por un momento que la firma californiana baja 300 euros su flagship. Nuestro amigo, el de la Apple Store, ya no salivaría tanto mientras magrea el móvil… Y es que la fascinación por la tecnología no tiene precio.