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“Nos basamos en el modelo americano que implantó Obama”. Así resume Fernando de Páramo (Granada, 1987) la estrategia de comunicación de Ciudadanos que tiene en las redes sociales uno de sus nichos fundamentales. Páramo es la cabeza visible del departamento de comunicación del partido que dirige Albert Rivera. Algo ha debido hacer bien Páramo y su equipo para convertir a un partido que hasta ahora no significaba gran cosa fuera de Cataluña (ni dentro) y que ahora se posiciona como la gran sorpresa en las Elecciones Generales 2015.
Comunicación digital ‘a la americana’
Para cualquier conocedor de la realidad política de Estados Unidos, las estrategias de comunicación que están siguiendo Ciudadanos (o Podemos) son mucho menos que innovadoras. Pero en un país como España, anclado durante décadas en el bipartidismo y en un mensaje político que giraba esencialmente en torno al “y tú más”, la irrupción de los partidos emergentes suena a milagro. Un milagro que se ha gestado, también, dominando las redes sociales y los nuevos canales de comunicación, pillando con el pie cambiado a los partidos tradicionales.
Pero de milagro nada. Estados Unidos no solo ha logrado que todos comamos hamburguesas, celebremos Halloween y vayamos al cine a presenciar sus esperpentos cinematográficos, también ha convertido a todos nuestros (nuevos) líderes políticos en aspirantes a Kennedy. Es la nueva política a la española, que en Estados Unidos es más vieja que la bandera de barras y estrellas.
“Soy un gran admirador de la política comunicativa americana, que pude seguir de cerca en mis estancias allí, al igual que el propio Rivera, que también cursó su Máster en ese país”, señala Páramo en una entrevista.
Además de terminar su MBA en Estados Unidos y “estudiaba una carrera por la mañana y otra por la tarde” el secretario de comunicación de Ciudadanos tuvo tiempo de inspirarse en el modelo Obama, que deriva del modelo Kennedy, para ir formando una estrategia de comunicación para su futuro partido que ha eclosionado en los últimos meses, convirtiendo a Ciudadanos en un fenómeno a estudiar.
“Nunca nos han gustado los actos a la antigua usanza, donde el peso lo tienen los gritos, la visceralidad, preferimos las cosas más modernas, acordes con el tiempo en que hemos nacido (…) Si se modernizan los contenidos lo normal es que también lo hagan las formas, queremos que el formato sea en sí mismo transmisor del mensaje”. El medio es el mensaje… Nos suena esto, ¿no?
Albert Rivera, en pelota picada pero con mucho sentido común
Poco se acuerdan de aquel mítico cartel en el que el dirigente de Ciudadanos aparecía desnudo. Fue uno de los primeros recursos innovadores de comunicación política ejecutados por Ciudadanos. Hoy, Rivera ya no necesita desnudarse. Todo el mundo le conoce. Gusta (en general) a las mujeres. Y a los hombres… ¿Por qué? Buena pregunta.
Pero para que Rivera haya conseguido gustar tanto, el equipo que dirige Fernando de Páramo ha tenido que apoyarse en las redes sociales para amplificar su mensaje. Primero de forma más imaginativa. Después, de forma más profesional.
Al igual que Podemos, Ciudadanos cuenta con un importante equipo de community managers y colaboradores (se habla de hasta 15000 “activistas digitales”) que gestionan las principales cuentas del partido y de algunas importantes figuras políticas de su estructura. Pero a diferencia de Podemos, el partido de Rivera debe luchar contra su principal hándicap: la ambigüedad.
“Es un debate obsoleto en el siglo XXI y en la política que pide hoy España. Hablar de bandos, rojos y azules, Villarriba contra Villabajo, me parece un debate desfasado (…) No es que tengamos unas directrices marcadas porque no somos partidarios de hacer grandes textos de posicionamiento político ni de aleccionar a los nuestros, sino de que la gente tenga sentido común”.
Ciudadanos enarbola la bandera del sentido común (¿hay algo más ambiguo que el sentido común?), mientras sigue de cerca a Podemos, el partido que domina la red pero que ha encontrado en Ciudadanos un rival muy duro. Ya son comunes las puyitas entre los departamentos de comunicación de ambos partidos, especialmente en Twitter, espacio en el que la batalla entre los emergentes durante las próximas semanas se prevé histórica.
Pero a Ciudadanos no le interesan las contracompañas, al menos según señala Javier Pereira, miembro del equipo de comunicación que dirige Páramo: “el mensaje negativo te resta. Por eso no queremos hacer contracampañas. Tener reputación para nosotros es muy importante”.
Y es que Ciudadanos ha conseguido una importante reputación en pocos meses. Y lo que es más importante para ellos: una gran intención de voto. A estas alturas Rivera parece más cerca de encarnar un Kennedy a la española que Pedro Sánchez… para desgracia del PSOE.