El futuro inmediato del sector inmobiliario
La actual crisis en la que llevamos inmersos los últimos años no sólo ha afectado al sector de la vivienda como el lector ya sabe sino que ha llevado a todas las capas de la sociedad y a todos los sectores productivos de la misma, es cierto que en el caso del sector inmobiliario, en el que nuestra economía apostaban muy fuerte en los años previos a la crisis, el retroceso ha sido verdaderamente espectacular y por el propio impacto económico que el sector poseía en la economía general en nuestro país tal vez más perceptible a primera impresión que en otros sectores.
A fecha de hoy realmente, y sobre todo desde la perspectiva de las inmobiliarias en nuestro país, cuesta reconocer el panorama en comparación con tan sólo hace seis años, y cuesta reconocer este panorama no sólo por la disminución más que evidente de agencias y empresas del sector sino también por la evolución que el propio sector está manteniendo, una evolución sin duda obligada por las circunstancias actuales.
En el análisis a futuro inmediato del sector inmobiliario en nuestro país todas las claves coinciden en que las modificaciones y el reajuste al que se está viendo sometido han llegado para quedarse, el panorama inmobiliario de la década anterior difícilmente va a volver a producirse nuestro país y por tanto ni los mecanismos de venta ni los mecanismos de promoción de viviendas van a ser iguales en ningún caso.
Por lo pronto para este 2013 que recién comienza parece importante recoger que la tendencia viene a indicar que al menos desde el punto de vista de las empresas del sector la previsión no es de retroceso acentuado como venía siendo hasta el año 2012, es una buena noticia relativa ya que lo que viene a indicar es que estamos cerca del suelo de este segmento tan importante en nuestro país, aunque por otro lado y habida cuenta de los enormes reajustes en sectores como los servicios y la banca, puede representar sin duda un magro consuelo, pequeño pero con sólo tiene cuentas, para un sector que sin duda ha sido de los más castigados por la crisis en España.
