Hipotecas según sus intereses: variables y fijos
|Es cierto que hoy en día comprar una vivienda resulta tremendamente difícil tanto por la propia situación económica, que sin duda hace que no todo el mundo pueda afrontar los gastos de una adquisición de vivienda, como por el hecho de que los préstamos hipotecarios se encuentran tremendamente limitados en su concesión, además, de que no resultan especialmente baratos.
Aun así hay personas que dar el salto a la compra de su primera vivienda, para ellos vamos a repasar, aunque obviamente son bastante conocidos, los diferentes modelos de préstamos hipotecarios en función del tipo de interés que aplican.
Realmente aunque vamos a poder encontrar diferentes subcategorías, lo cierto es que las hipotecas más habituales en nuestro país se corresponden con cuatro grandes grupos, todos identificados con un modelo concreto de aplicación de intereses.
La más habitual es la hipoteca a interés variable, en este hipoteca el factor fundamental reside en la posibilidad de beneficiarse (o de ser perjudicado) por la evolución del índice de referencia, lo cual en las sucesivas revisiones periódicas, que habitualmente se realizan de manera anual, el producto se sitúa actualizado en función de dicha evolución. Aquí encontramos las famosas cláusulas techo y suelo, que tanto han perjudicado a los usuarios en los últimos años, y que estamos viendo como una tras otra se van desmontando tras diversas sentencias judiciales. Por regla general en este tipo de hipotecas los plazos de amortización son mayores.
El otro gran grupo de hipotecas son las llamadas interés fijo. En este modelo de préstamos hipotecarios los intereses van a permanecer constantes a lo largo de la vida del producto; lo cual significa que independientemente de la evolución de los índices de referencia de los mercados, la cuota de hipoteca se mantendrá constante en el tiempo. Obviamente para períodos en los que los índices de referencia crecen, esta hipoteca aporta la seguridad de mantener una cuota estable independientemente de ese crecimiento, sin embargo también ocurre lo mismo cuando los índices de referencia bajan, momento en el que no podemos beneficiarnos de dicha bajada. Habitualmente estas hipotecas cuentan con menores plazos de amortización, el apartado de gastos y comisiones suelen ser similares.